Séptima partida

Tras recuperarnos del ataque de esos malditos bereberes asalta dunas, repasé mentalmente la misión en mi cabeza.
Hacernos pasar por historiadores y arqueólogos del museo británico y de esa forma poder acceder a la isla de File.
La isla estaba situada cerca del centro de una inmensa presa en el río Nilo. Allí debíamos encontrar el libro de los misterios, si esque tal cosa tiene forma de libro, recuperándolo del templo de Isis. La ayuda y orientación la conseguiríamos de Tarik, nuestro enlace en la zona, y nos reuniríamos con él en la ciudad de Aswan, al Noroeste de nuestra posición.

Mientras Johann se orientaba con su brújula para saber hacia donde ir en este inmenso desierto, me ayudé de Andreas para intentar ocultar los cadáveres bajo la arena mientras, más allá, Dereck se preocupaba de la herida de bala de Dietrich. Teníamos que movernos o esa herida podría ponerse fea.

Tras asegurar la carga en uno de los camellos decidimos partir rumbo norte para poco después ir al oeste.
Para evitar problemas decidimos esperar con los camellos y la carga lejos de la ciudad. Dereck y yo nos refugiamos del sol con una lona mientras Johann, Andreas y Dietrich parten en busca del contacto.

Los tres alemanes fueron perseguidos por una multitud de arapientos y pedigüeños lugareños.
Johann decide contratar a Mohammed, un varón al que preguntó un par de cosas, para que los guíe hacia la dirección pactada.
De manera casi irremediable se vieron obligados a enseñar su documentación falsa y dejarse robar por los agentes del orden, los cuales vieron como aceptable la cantidad de 15 libras en concepto de tasas varias.

Una vez en casa de Tarik, un hombre gordo y de barba perfilada, son recibidos y atendidos con dátiles y agua. Se atiende la herida de Dietrich y se hace que unos hombres de Tarik hagan reunirse al resto del grupo en la casa.
A la mañana siguiente se nos facilitaron las acreditaciones falsas para acceder a la isla. Tarik nos dijo que nos ayudaría a entrar pero no a salir, según sus ordenes no tenía porque volver a vernos tras hoy, aunque nos dijo lo revisaría tras hacerle saber que teníamos entendido, él nos daría cobertura en caso de que tuviéramos que necesitarla. La zona debía ser segura pues por la información recogida, el ejercito debía estar muy al norte en estos momentos, aunque a Johann aun le rondaba en la cabeza la idea de las huellas profundas que vio por las calles.

Los hombres de Tarik nos acompañan en coche hasta una barcaza pesquera, la cual navega rumbo a la isla todos los días sobre las doce del medio día, volviendo sobre las quince horas rumbo a puerto. Convenimos con el pescador de que de necesitar sus servicios sería bien remunerado si nos espera para estar a nuestra disposición. No sabíamos si lo que allí recuperiamos era una losa, una piedra enorme o un libro tal y como los conocemos ahora.

La vista de la isla era impresionante. Una isla con diversas arquitecturas y estilos. Diferentes grabados, jeroglíficos, dioses y divinidades animales...increíble tener la oportunidad de contemplar ese crisol de culturas antiguas.

Como no sabíamos siquiera la forma que tendría el templo de Isis, decidimos ir catalogando y fotografiando templo a templo, todo lo importante y característico.

Algunos de ellos eran claros templos egipcios mientras que algunos destacaban o se diferenciaban al ser de culturas romanas o griegas. Es inquietante que se haya elegido este lugar para erigir importantes recintos de distintas creencias. Los misterios que podían esconder eran tales que, sumados a las extrañas vivencias paranormales que había sufrido el grupo, hacía mi imaginación volara, buscando cualquier pista o imagen que hiciera desvelar poco a poco, este rompecabezas gigante.

Tras reconocer y descartar los edificios no egipcios, como el arco de trajano, decidimos adentrarnos en una de las ruinas quizás más peculiares mientras Dietrich permanecía en las cercanías vigilando desde un punto alto.
La entrada estaba franqueada por dos figuras de costado con las manos semiflexionadas hacia delante. En el lado izquierdo se veía una figura en movimiento con tres cuerpos extraños sobre la cabeza, encima de ella, y al igual que en el lado derecho, hay una persona con algo en la mano que entrega a una figura que permanece sentada. En el lado derecho, en la parte baja hay más figuras que portan el sol en sus cabezas, pensamos que haciendo referencia quizás a una deidad o escala social o religiosa. Es una pena de que no nos acompañe ningún historiador.

El edificio se componía de una entrada con tres niveles de paredes austeras y lisas. Más adelante se encontraba un hall
con dos inmensos leones de piedra sobre un pedestal rectangular. La mirada silenciosa de todos los allí presentes se pudo sentir, buscando con miedo instintivo hacia donde huir en caso de que cobraran vida. Por suerte no pasó nada anormal y se continuó adelante no sin antes discutir el destrozar las estatuas, que finalmente fueron dejadas en paz en pos del arte.

Las estancias laterales y del hall, al igual que la ultima gran sala, estaban esquilmadas y deterioradas hasta la saciedad. El paso de distintas culturas y ladrones habían dejado huella en la zona. Las losetas con grabados se habían extraído.Las recurrentes formas fálicas estaban cinceladas en muchos casos y si no tapadas con cruces cristianas en otros.
Llegados a ese punto y por la orden de Johann, el soldado Dereck fue a explorar de mala gana la cornisa izquierda del edificio, pues por la disposición de las salas, parecía indicar pudiera haber una sala escondida en esa zona. Mientras tanto se exploró el resto de la ultima sala, con tres entradas.
Las laterales no desvelaban nada nuevo, pero la central nos descubría un fresco escondido y que aún estaba siendo tratado, pues se veían zonas con pinturas y yesos sobre la imagen de una mujer con los brazos extendidos con unas alas bajo ellos y diversos jeroglíficos, alguno de ellos eran reconocibles, como el trono que había sobre su cabeza, la extraña cruz que portaba una imagen similar, etc.

Al poco de divisar la imagen, los pasos de Dereck nos anuncian su regreso portando un interesante descubrimiento.
En el lateral del muro ha encontrado el ojo de una "cerradura" de lo que puede ser una sala secreta revestida de oro.

El tiempo se congela pero nuestras cabezas siguen uniendo las piezas del rompecabezas.

Algo se nos escapa.

Acabas de batir un record, el resumen más rapido de la historia

Un par de correcciones Tana, para que lo edites:

* Isla de File, no Files
* Libro de los Misterios, los milagros son del mundo en que vivimos...

Ok, cambiado.

Porcierto, llevabas razon Jorge. el libro de toth es un libro de lñeyenda que se dice traia la desgracia al que lo portaba pero daba poderes ilimitados. varios faraones se dice lo pudieron tener , aunque se habla de que uno de ellos lo quemó por miedo a su poder ( como mario con los libros del temple, igual) Está curioso. Me enterao que el tarot se dice puede venir tambien de ese libro.

Estos egipcios como se lo montaban....